Este viernes se disputarán las semifinales masculinas en Roland Garros y, en el día de su 36° cumpleaños, Rafael Nadal buscará una victoria que lo deje un paso más cerca de su 14° título en el Grand Slam parisino. El español, número cinco del mundo, enfrentará al alemán Alexander Zverev, tercero del ranking, en un duelo que se disputará no antes de las 9.45 de Argentina. Un rato más tarde, no antes de las 12.30, el noruego Casper Ruud, octavo de la clasificación, y el croata Marin Cilic, 23°, definirán el segundo finalista.
Por el peso de su historia en la capital francesa, Nadal parte como favorito en su semifinal. Más después de haberse anotado una victoria épica en cuartos ante el serbio Novak Djokovic, número uno del mundo.
Rafa, que busca extender su récord como máximo ganador de Grand Slams de la historia (hoy fijado en 21), no llegó a París en su mejor momento, después de perderse buena parte de la gira de canchas lentas de Europa para recuperarse de una fractura costal por estrés, que sufrió en Indian Wells. En la previa de la gran cita de polvo de la temporada, solo jugó dos torneos: Madrid (cayó en cuartos) y Roma (en octavos). A esa falta de rodaje, se sumó el dolor constante que siente en su pie izquierdo por esa lesión crónica y sin remedio que lo aqueja desde 2005.
Sin embargo, como ocurre cada año, al pisar las canchas anaranjadas de Bois de Boulogne, pareció recibir una inyección extra de fuerza y confianza. Así, superó sin ceder sets sus tres primeros partidos; aprobó una dura prueba en octavos de final, al vencer en cinco parciales al canadiense Felix Auger-Aliassime; y en cuartos, celebró esa inolvidable victoria en el 59° capítulo de su historial ante Djokovic.
Tras ese partido, muchos afirmaron que su consagración era ya un hecho, pero él aseguró: «No he ganado nada aún, solo me he dado la oportunidad de jugar de nuevo una semifinal en Roland Garros. Se viene otro gran desafío».
Es que Nadal sabe que, con su pie maltrecho, todo puede pasar. Sobre todo porque en el camino, su próximo obstáculo será Zverev, que se jugará mucho más que el pase a la final.
Luego de las derrotas de Djokovic y Daniil Medvedev (perdió en octavos con Cilic), el alemán quedó ante una oportunidad única: la de llegar por primera vez al número uno. Pero para hacerlo, deberá ganar el título en París.
Zverev, de 25 años, llega a la semis confiado, tras bajar en cuartos al español Carlos Alcaraz, el jugador del momento en el circuito. Y por la potencia de su servicio y la fortaleza de su revés, es un rival que podría poner muy incómodo a Nadal. Es más, de los tres partidos que le ganó al mallorquín en el pasado (está 3-6 en el frente a frente), uno fue en polvo de ladrillo, en los cuartos de final de Roma 2021.
El nacido en Hamburgo jugará sus segundas semifinales consecutivas en Roland Garros (perdió el año pasado con Tsitsipas) y quiere clasificarse por segunda vez a la final de un Grand Slam, tras la del US Open 2020, que perdió contra el austríaco Dominic Thiem.
Ruud-Cilic, la semis que nadie esperaba
El ganador del choque entre Nadal y Zverev, se medirá en la final con el vencedor de la semis que jugarán Casper Ruud (8°) y Marin Cilic (23°), un choque que nadie esperaba en esta instancia del Grand Slam francés.
El noruego, de 23 años, no da mucho que hablar, ni por tener un juego espectacular en la pista, ni fuera de ella, pero es el jugador con más victorias en polvo de ladrillo desde 2020 (864) y más títulos en esta superficie (7, dos en Buenos Aires, en 2020 y 2022). Este año, es el quinto con más partidos ganados en este tipo de canchas, solo superado por Nadal, Alcaraz, Tsitsipas y Zverev. Pero podría jugarle en contra el hecho de que jugará sus primeras semifinales de un Grand Slam.
Precisamente, la gran ventaja de Cilic es la experiencia en este nivel. El croata, campeón del US Open 2014, disputará por sexta vez las semis de un «grande», tras convertirse el miércoles en el quinto jugador en activo en llegar a esa instancia en los cuatro Majors, junto a Djokovic, Nadal, Roger Federer y Andy Murray. Aunque la última fue ya hace más de cuatro años, en Australia 2018.
Después de algunas temporadas de flojos resultados, Cilic se reencontró con su tenis y, en París, viene en racha. Tras bajar en octavos a Medvedev derrotó en cuartos a otro ruso y top 10, Andrey Rublev (7°). En ese partido, una de las claves fue su poderoso servicio, un golpe que lastimará también mucho a su rival.
Ruud, primer tenista de su país en las semis de Roland Garros, bajó en cuartos al danés Holger Rune (19 años y la gran revelación del certamen), a quien le ganó en cuatro sets tras tres horas y 15 minutos.
El noruego, que antes de desembarcar en París conquistó el título en Ginebra, lidera por 2-0 el historial ante el croata, a quien venció en los octavos de final de Roma 2020 y en la segunda ronda de Toronto 2021.
Fuente AFP y EFE
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